Páginas

sábado, 30 de mayo de 2015

Hábitos para Comenzar un Buen Día

Esta es una lista de “hábitos mañaneros saludables” que me han sido efectivos para comenzar un buen día; espero las adaptes a tu estilo y te den buenos resultados como a mí.

1. El Club de las 6:00 am: Levantarse una hora antes de lo habitual

Confieso que no todos los días lo logro, pero ha sido un buen truco para dedicarme más tiempo y avanzar en mis tareas.

Esa hora extra, es ideal para hacer yoga, meditación, estiramientos, dar un paseo “mañanero”, tomar un buen baño, preparar un poderoso desayuno, leer un poco y acompañarlo con un te. Y de ser posible, ir caminando o en bicicleta a la oficina; todo esto te permitirá adaptarte a un nuevo día y comenzarlo con más energía.

Vía: Pinterest Cintia Días

Vía: Pinterest Cintia Días

 

2. Una lista de cosas por hacer en la mañana

Que sea alcanzable y realista. Te sentirás bien al final del día viendo todas las marcas de “check-it”.

Adicional a esto, puedes elegir: “un día de planeación”. En mi caso son los sábados por la mañana y procuro en-listar todos los pendientes y eventos que debo cubrir por la semana.

Siempre habrá cosas no planeadas o cosas urgentes que incluir; pero éste hábito es útil en el punto en que aprendes a equilibrar el respeto por tus tiempos y a ser flexible y analítico sobre lo que es “urgente”. ¿En verdad ese algo no puede esperar?

Vía: Pinterest

Vía: Pinterest

3. Un desayuno de colores bien poderoso

¡Si! los colores de las frutas. En el desayuno combina frutas y frutos secos, ¿has oído acerca de los super alimentos? Prueba incluirlos en tu dieta, son dosis de energía natural y de nutrientes. Licúalos, mézclalos, ¡agrégales miel!

Algunos de ellos son: amaranto, miel de abeja, aceite de coco, moras, almendras, entre otros. Con ellos podrán tener siempre a la mano “snacks” saludables y evitar la tentación del refresco y las “papitas” durante el resto del día.

Vía: beaucoup-d-amour.tumblr.com

Vía: beaucoup-d-amour.tumblr.com

 

4. Evita leer el email desde tu cama

Es muy fácil apagar el despertador del celular y mientras me decido a pararme, lo programo 10 minutos más y reviso el email, aún acostado.

¿A poco no es como la tortura china? Abrir el ojo a un nuevo día y sabotear nuestros despertares con el email y todos los pendientes que nos esperan.

Antes, cuando no estábamos conectados todo el día, había que llegar a la oficina primero. Bueno, pues propongo regresar a lo básico; iniciar primero por los rituales que me llenarán de energía para después comenzar un buen día.

Vía: http://michaelpiggott.wordpress.com/

Vía: http://michaelpiggott.wordpress.com/

5. Mantén recargada la batería Doble AA: Atento y agradecido

La parte más importante de todo esto es la práctica de estar atentos y agradecidos. Así sea en el camino al trabajo, disfrutar del clima, las vistas, el vecino que da los buenos días.

Así también, dar lo mejor de nosotros cada día y crear hábitos para nuestro bienestar. ¿Por qué solo despertar y dormir, si se puede hacer cada día algo para mejorar, avanzar y estar atentos a lo nuevo que hay por aprender?.  Esto no solo es para beneficio nuestro, sino también para la gente que nos rodea.

Nuestro mundo está en constante cambio, cada hora, cada segundo, así que mejor asegurarse de ser testigos y de contribuir lo mejor que se pueda.

 

Vía: Mafalda Oficial

Vía: Mafalda Oficial

Ahora, un momento de instrospección: ¿Y tú, qué buenos hábitos mañaneros tienes para comenzar un buen día? Podemos aumentar tips a esta lista, comparte tu hábitos saludable en la sección de comentarios.

5 Tips para Dormir Mejor


Un estudio reciente indica que 1 de cada 4 adolescentes tiene dificultades para dormir. La falta de sueño puede afectarlo todo: desde nuestras emociones a la capacidad de concentración en diferentes tareas, como conducir. Puede afectar el rendimiento deportivo, aumentar las posibilidades de enfermarse y, en algunas personas, puede relacionarse con el aumento de peso.

¿De qué manera podemos dormir la cantidad de horas que necesitamos? A continuación, te damos algunas ideas:

  1. Permanecer activo durante el día. Probablemente has notado cómo corretean los niños pequeños... y la profundidad de su sueño. Sigue el ejemplo de los pequeños y haz ejercicio físico al menos 60 minutos por día. La actividad física puede disminuir el estrés y ayudar a sentirse más relajado. Pero no hagas ejercicio muy cerca de la hora de ir a dormir porque puede despabilarte sin llegar a disminuir tus revoluciones.
  2. No consumir drogas ni alcohol. Muchas personas creen que el alcohol y las drogas los relajan y producen somnolencia, pero no es así. El alcohol y las drogas perturban el sueño y aumentan las probabilidades de despertarse a mitad de la noche.
  3. Darle las buenas noches a los aparatos electrónicos. Los expertos recomiendan usar el dormitorio sólo para dormir. Si no puedes convertir tu dormitorio en una zona libre de tecnología, por lo menos apaga todo una hora o más tiempo antes de apagar las luces. Nada te dice “Despierta, ¡está sucediendo algo!” más explícitamente que el zumbido de un mensaje de texto o el sonido de aviso de un mensaje instantáneo.
  4. Ten una rutina para dormir. Ir a la cama a la misma hora todos los días contribuye a que el cuerpo espere el sueño. Establecer una rutina fija para dormir puede aumentar este efecto relajante. Así que relájate todas las noches leyendo, escuchando música, pasando tiempo con una mascota, escribiendo en un diario, jugando sudoku o haciendo cualquier otra cosa que te relaje.
  5. Espera una buena noche de sueño. El estrés puede producir insomnio: cuanto más desesperas por no poder dormir, más riesgo corres de quedarte despierto mirando el techo. En lugar de preocuparte porque no podrás dormir, recuérdate que puedes hacerlo. Di “Esta noche dormiré bien” varias veces durante el día. También puede ser útil practicar ejercicios de respiración o posiciones suaves de yoga antes de ir a la cama.

Rasgos faciales Revelan Nuestra Personalidad

Por siglos, los chinos han creído que los rasgos faciales pueden revelar las verdades escondidas de nuestra personalidad. Puede sonar exagerado, pero un estudio reciente publicado en la revista "Royal Society of Biological Sciences" descubrió que las personas con ciertos rasgos faciales pueden ser engañosas.
Así que ¿podría ser esto más que un mito? la filosofía china enseña que hay cinco elementos que influyen en nuestras vidas: madera, agua, fuego, tierra y metal. Cada uno de nosotros tiene una mezcla de todos estos elementos en nuestras cara, pero uno domina más que los otros.
Cara de Tierra
Mandíbula ancha, frente ancha pero corta, nariz pequeña, cejas largas y planas, y ojos grandes.
Estabilidad y seguridad son sus consignas. Son metodológicos, prácticos y con los pies bien puesto sobre la tierra. Un poco tímidos, toman tiempo para abrirse a los demás, pero cuando dejan entrar a alguien a sus vidas son leales y constantes. Totalmente confiables.
La tierra es asociada con los celos, se sienten bastante cuando son heridos y les toma bastante tiempo olvidarse de las traiciones.
Cara de Fuego
Mejillas redondas, ojos grandes y radiantes, mandíbula amplia, mentón puntiagudo, boca ancha.
Espontáneos, aventureros, sociables y extrovertidos, llaman mucho la atención. 
No piensan mucho en las consecuencias de sus acciones, están muy ocupados disfrutando el momento, les encanta el drama y si las cosas están muy aburridas, son los que hacen temblar la fiesta.
Caras de Agua
Ojos hundidos y brillantes con largas pestañas, frente amplia, cejas expresivas y delgadas, boca flexibles y mentón prominente.
Son flexibles, se adaptan fácilmente y son buena compañía. Les gusta la variedad y los cambios, pero piensan demasiado las cosas, son bastantes perceptibles e intuitivos. Sonríen con facilidad y suelen hacerle las cosas más fáciles a todos.
Caras de Madera
Frente alta, mandíbula pronunciada, ojos semi-cerrados y largos, nariz recta con la boca estrecha.
Las personas de madera son despreocupados cuando andan en territorios desconocidos, son ambiciosos y tienen una gran autoestima que reflejan confianza. Tu entusiasmo por las cosas nuevas pueden hacerte un poco irritable con aquellos que ven obstáculos donde tú no los ves.
Caras de Metal
Ojos pequeños y hundidos, pómulos prominentes, nariz fina y labios delgados.
Extremadamente auto-contenidos, pueden parecer un poco distantes. Son decididos y enfocados, con mucha tenacidad.
No muestran sus verdaderas emociones, pero sienten las cosas profundamente. Su disciplina de ser una persona de acero deja a las personas inseguras de su sentimiento.
Puede que les guste controlar a las personas. El metal es asociado con impaciencia e ira, y muy rara vez se dan por vencido.
Entonces... ¿cuál eres tú?

Trucos Para Manipular la Mente y las Emociones de las Personas


El cerebro puede ser una asombrosa y poderosa herramienta si sabes como controlarlo. Aprende estos hacks psicológicos citados por Redditores para maximizar su potencial. Y recuerda, un gran poder conlleva una gran responsabilidad, así que usa estos trucos psicológicos para el bien de la humanidad y no para la maldad.

1. Mátalos de amabilidad

Cuando te consigas con una persona grosera, no caigas a su nivel. En vez de eso, mantén la calma y trátalo bien. Un Redditor que trabaja de comerciante dijo: "cuando alguien molesto me reclama algo, mantengo la calma, esto hará que se enoje aun más, pero luego se sentirá avergonzado." Se amable y terminarás ganando la batalla.

2. El silencio vale oro

Cuando alguien te diga algo que te molesta, simplemente date la vuelta y quédate en silencio. Las personas se sienten incómodas con el silencio y muchas veces terminarán cediendo a tu favor sólo para evitar la incomodidad.

De igual forma (y esto es importante), cuando alguien esté de acuerdo en ayudarte con algo que le has pedido, no continúes hablándole. Porque mientras más hables, más oportunidades tienes de que esa persona se arrepienta de ayudarte. Este tip es bastante útil para negociaciones.



3. Reflejo de introspección

Si colocas un espejo reflejando a tu furioso cliente, ellos tratarán de actuar más racional.

4. Disfraza una petición como una oferta

De acuerdo con uno de los Redditores: "Cuando Teddy Roosevelt era candidato a la presidencia, su partido imprimió tres millones de folletos con una imagen de Teddy y una copia del discurso de campaña. Luego se dieron cuenta de que en el folleto no colocaron los derechos de la fotografía. En vez de explicarle la situación al fotógrafo, el cual pudo pedirle bastante dinero, el partido le hizo una oferta, de que utilizarían esa imagen a cambio de muchísima publicidad si el estudio les pagaba 250 dólares. El estudio pagó el dinero."

5. Mantén a tus enemigos cerca

Si sabes que te van a cuestionar en una reunión, siéntate al lado de la persona que va a realizar el ataque. Esto acorta la distancia entre tú y el agresor y puede hacerlo sentir incómodo. El encuentro se vuelve más personal cuando no está respaldado por el resto del grupo.


6. Nota el color de los ojos

Haz una pausa para notar el color de ojos de la persona mientras ríes. Este truco te ayudará a mantener la cantidad de tiempo necesaria de contacto visual con las personas y a proyectar confianza y simpatía.

7. Compromiso gradual

Las personas aceptarán hacer lo que les pidas si les pides algo mucho más fácil antes.

8. Enseña a alguien

Si estás tratando de aprender algo nuevo, enseña a alguien más acerca de esto y hazlos preguntarte sus dudas. Para aprender algo de verdad tienes que ser capaz de enseñarlo bien.


9. Evita que la multitud te golpee al caminar

Mientras camines en la calle, enfócate en los hombros o en el espacio entre las cabezas, la dirección de tu mirada indicará hacia qué lado vas a caminar y las personas desviarán su caminar para no chocar contigo.

10. Mastica chicle cuando estés nervioso

Si estás nervioso por algo, comienza a masticar chicle. Aparentemente, si estás comiendo, tu cerebro pensará que no estás en ningún peligro porque no estarías comiendo si estuvieras en peligro.

11. Haz que alguien hable acerca de sí mismo

Cuando conozcas a alguien, pregúntale acerca de él. Las personas aman hablar de ellos mismos, así tendrán una buena impresión de ti. Una cita de Maya Angelou lo pone mejor: "las personas olvidarán lo que dijiste, las personas olvidarán lo que hiciste, pero las personas nunca olvidarán cómo los hiciste sentir." Si ellos disfrutan la conversación contigo, te mirarán con una óptica más positiva.

12. Cambia la manera de pensar antes de la entrevista

Antes de ir a una entrevista de trabajo, engaña tu cerebro diciendo que conoces de toda la vida a tus entrevistadores y que son viejos amigos que están a puntos de reencontrarse. Dí a ti mismo que no puedes esperar más para verlos.

13. Emociónate al conocer personas

Si actúas feliz y emocionado cuando conoces a alguien, ellos siempre actuarán de la misma manera hacia ti en el futuro.

14. Manos cálidas

Si tienes las manos tibias cuando la estreches a alguien más, darás una impresión más positiva, y tendrás más posibilidades de que las personas quieran estar contigo.

15. Altera los latidos del corazón

Si en una primera cita llevas a alguien a un lugar emocionante, como una montaña rusa o a una película de terror, esta les aumentará los latidos del corazón y así esa persona asociará el sentimiento de adrenalina con el estar contigo.



16. Pedir favores te hacen más atractivo

Pídele a alguien que te haga un pequeño favor, y él o ella pensará que le gustas por el hecho de estar dispuestos a hacerte ese favor.

17. Evita muletillas

Evita usar muletillas en las conversaciones como "este," "emm," y "umm". Esto indica claramente que estás pensando lo que estás diciendo, esto te quitará la confiabilidad. Usa una pausa corta en la conversación para acomodar tus pensamientos sin decir nada.

18. Encuentra a quién le agradas en un grupo

En una conversación grupal puedes descubrir a quien le interesas observando qué persona te mira cuando todos se están riendo. Al parecer las personas miran automáticamente a los que lo hacen tener más sentimientos cuando un grupo está riendo.

19. Llama a las personas por su nombre

Si llamas a alguien por su nombre establecerás un sentido de confianza y amistad. Por ejemplo, cuando te despidas de alguien dile "¡adiós Juan!" en vez de solo decir "¡adiós!"

20. Coraje, no estrés

Tu cuerpo responde al estrés de manera similar que al coraje, así que si te sientes estresado dí a ti mismo que estás reaccionando al coraje y no al estrés.

21. Ve si quieren hablar contigo

Si te acercas a personas que estén conversando, podrás saber si estas quieren meterte en la conversación si sus pies te apuntan. Si solamente mueven el torso hacia ti, ellos no quieren conversar contigo.

22. ¡Grandes sonrisas!

Sonríe lo más que puedas, y enseguida te sentirás más feliz.


23. Levántate instantáneamente

¿Tienes problemas para despertarte? Intenta estirando tus pies y gritando "¡¡SI!!" cuando apenas suene el despertador.

24. Irradia confianza

Asume que le agradas a todo el mundo cuando camines entre las personas. Esto te pone en una disposición más amistosa y más confiable. Si ya tienes un pensamiento de "todo el mundo me odia," esto será como una auto-profecía contra ti.

25. Da una razón al favor que pides

Solamente dando una explicación del favor por más tonta que parezca, hará que las personas piensen que tienes una buena razón para ello, incluso si no la tienes. Un Redditor dijo, "Recuerdo que leía acerca de un estudio hecho en una universidad donde usaban todas las combinaciones imaginables de palabras para pedir si podían desconectar los cables de las impresoras, y consiguieron que la frase "es que..." causaba un corto circuito en los cerebros de las personas para que creyeran que hay una razón lógica para eso, incluso si alguien decía algo estúpido como "¿Puedo desconectar el cable? Es que necesito hacer unas impresiones"

26. Cambia el "tengo que" por el "debo"

En vez de decir que tienes que hacer algo, dí a ti mismo que debes hacerlo. Esto te dará más confianza para comenzarlo a hacer. Por ejemplo, decir "debo hacerme una quimio" en vez de "tengo que hacerme una quimio" hará crecer el espíritu luchador que hay en ti.

27. Limpieza contra la depresión

¿Te sientes deprimido? Comienza a limpiar tu casa, y te sentirás satisfecho y feliz cuando termines.

10 razones para dejar de juzgar a los demás

 

Juzgar a los demás: algo habitual

Es habitual juzgar a los demás. Pese a que no nos gusta que nos juzguen de manera incorrecta, es habitual juzgar a otras personas todo el tiempo. Nos juzgan y juzgamos constantemente, incluso muchas veces sin darnos cuenta del daño que hacemos. Lo peor de todo es que pasamos tanto tiempo juzgando a los demás, que muchas veces no invertimos el tiempo necesario en mirarnos a nosotros mismos y reconocer nuestras propias limitaciones.
Para entender las causas de por qué juzgamos o criticamos a los demás, los científicos llevan tiempo investigando que zonas del cerebro actúan cuando lo hacemos. La neurocientífica Rebecca Saxe, una investigadora especializada en el análisis de las bases neuronales y psicológicas de la cognición social del Instituto de Medicina de Massachussets, encontró que existe un área concreta del cerebro que se activa cuando tratamos de entender por qué los otros actúan como actúan. Este área se llama “unión temporoparietal”, y se encuentra entre el lóbulo temporal y el lóbulo parietal del cerebro. Al parecer, esta región juega un papel fundamental en los procesos de distinción entre el yo y los demás.
Por otro lado, un estudio curioso publicado en Trend in Cognitives Sciences, afirma que los ciudadanos valoran las intenciones de una persona y le atribuyen una determinada personalidad o carácter basándose en gran medida en los rasgos de su cara. De esta manera, sostienen que la gente tiende a tomar importantes decisiones, desde votar a un político a culpar o juzgar a alguien sin conocerle, basándose en elementos tan arbitrarios y sutiles como los rasgos faciales.

10 razones para no juzgar a los demás

Ya que juzgar a los demás de manera equivocada puede hacer daño, en el artículo de hoy os damos unos consejos de cómo no juzgar a los demás:

1. Piensa antes de actuar

Muchas veces nos dejamos llevar por lo que nos dicen las apariencias externas y otras veces nos dejamos llevar por corazonadas. Es importante que nos paremos unos segundos y analicemos bien la situación. Si vamos a juzgar a alguien, que sea con todas las pruebas sobre la mesa.

2. Practica el Mindfulness

El Mindfulness es una terapia de tercera generación que se basa en técnicas nacidas del budismo. Pero el Mindfulness, lejos de ser una técnica, es una filosofía que tiene como premisa: “no juzgar a los demás ni a uno mismo”. Está demostrado que adoptar una actitud de compasión y de “no juzgar, afecta de manera positiva al bienestar de la persona que practica esta filosofía.

3. Nadie es perfecto

Intenta ser más tolerante con los demás. Puede que no apruebes algo de que alguien ha hecho, pero a no ser que sea algo horrible, vive y deja vivir. Todo el mundo se equivoca, no es bueno juzgar a los demás porque pienses que tú lo harías de otra manera.

4. Recuérdate que no todos somos iguales

Siguiendo con el punto anterior, no todo el mundo es igual. La cultura, la familia, los amigos, la educación que recibimos, todos tenemos una historia diferente que contar. Solo porque a ti no te guste algo no significa que esté mal.

5. Mírate a ti mismo

Si en vez de pasar más tiempo juzgando y criticando a los demás, pasas más tiempo observándote a ti mismo, te darás cuenta de que tú tampoco eres perfecto. Si entiendes que todos nos equivocamos, es posible que seas más tolerante con los demás.

6. Siéntete bien contigo mismo

Cuando somos capaces de entendernos mejor y aceptar tanto nuestras virtudes como nuestros defectos, no solamente desarrollamos una mayor compasión hacia nosotros mismos sino también en general hacia los demás.

7. Dice mucho de ti

Ser una persona con una mente abierta y tolerante dice mucho de ti. Mostrar una actitud positiva hacia los demás te hace grande.

8. Piensa que las apariencias engañan

Pensar u opinar sobre alguien, tanto para bien como para mal, sin saber absolutamente nada de él, sin conocerle, sin darle una sola oportunidad, está mal. Hay que tomarse un tiempo para conocer bien a las personas antes de emitir juicios sobre ellas.

9. Recuerda que juzgar puede hacer daño

A nadie le gusta que le juzguen de manera incorrecta. Si no te gusta que te lo hagan a ti, no se lo hagas a los demás. Es la regla de oro y todos deberíamos respetarla.

10. No siempre tienes la razón

Al juzgar a los demás, aunque creas que posees la verdad absoluta, eso no es cierto. Las cosas suceden por muchas causas y muchas veces no sabes ni la mitad de la historia. Por ejemplo, puede ser que conozcas a una chica atractiva y que tenga una actitud fría hacia ti. Es posible que haya tenido una experiencia en el pasado que le hace ser más precavida a la hora de conocer chicos. Si la juzgas como una persona desconsiderada, es posible que te estés equivocando.

Los 5 rasgos de personalidad de un genio

 

¿Cómo es la personalidad de los genios?

¿Cuál es la característica que define a un genio? Es una pregunta que se ha hecho la humanidad a lo largo de los tiempos. Muchos quieren llegar a alcanzar la excelencia pero sólo unos elegidos logran tal empresa. En la mayoría de casos, no comprendemos cómo ha ocurrido que justo esa persona haya podido llegar ahí. ¿Por qué razones Picasso o Dalí pudieron llegar a desarrollar tan fructíferas e innovadoras obras? ¿Por qué Mozart tenía una capacidad para componer mayor que cualquiera ya a corta edad? ¿Cómo pudo Albert Einstein llegar a formular teorías tan abstrusas como la de la relatividad?
Se suele decir que los genios lo son gracias a un don innato: contienen el potencial necesario para desarrollar un talento en una actividad determinada. Esta visión no es del todo acertada. Sin duda, los genios son talentosos de forma natural, pero la potencialidad no es la característica que define al genio. A continuación detallaremos un total de cinco rasgos que todo genio cumple.

1. Son analíticos e impulsivos

Para escribir su libro Creatividad (Paidós, 2008), el psicólogo Mihaly Csikszentmihalyi entrevistó a noventa y un genios, de muchas disciplinas distintas, entre los cuales se encontraban quince premios Nobel. Una de las conclusiones a las que se llegó con esta investigación es que las personas de gran talento van sobrados de dos características: curiosidad e impulsividad. “Son personas abducidas por su trabajo, y a pesar de que estén rodeadas de personas más talentosas, su inconmensurable deseo de conocer la realidad supone un rasgo definitorio”, argumenta Csikszentmihalyi.

2. No importa tanto la formación reglada como la dedicación a su especialidad

Tenemos tendencia a relacionar el expediente académico con la excelencia, pero no existe tal relación en muchos de los casos. El profesor de la Universidad de California Dean Simonton investigó y analizó los expedientes académicos de 350 genios que vivieron entre 1480 y 1860, entre los cuales se encontraban nombres como Leonardo da Vinci, Galileo Galilei, Ludwig van Beethoven o Rembrandt. Estableció que el nivel de educación formal que cada uno había recibido y fijó parámetros de excelencia según sus obras. Las conclusiones fueron inesperadas. La relación entre formación y excelencia conformaba un gráfico con forma de campana: los genios más brillantes eran aquellos cuyo nivel de estudios era medio, lo que podría equivaler a una diplomatura. Aquellos que tenían un bagaje mayor o menor resultaban menos creativos.
Los más brillantes siguieron estudiando de forma autodidacta, además de ser unos enamorados de su trabajo, llegando a dedicar la mayor parte del día a sus estudios y labores. Los creadores de mayor rango son aquellos que llevan su pasión al extremo.

3. Autocríticos

El psicólogo Howard Gardner afirma que los grandes creadores como Picasso, Freud o Stravinsky tenían un patrón afín de trabajo, fundamentado en el ensayo y error: observaban un problema, ingeniaban una solución, la experimentaban y componían una retroalimentación sistemática. “Los individuos geniales”, explica Gardner, “destinan mucho tiempo en recapacitar acerca de lo que quieren conseguir, si han tenido éxito o no y, si no lo han alcanzado, qué deben cambiar”.
Las mentes creativas son también las más metódicas.

4. Son dedicados, solitarios y pueden llegar a ser neuróticos

Los creadores están continuamente reflexionando sobre su obra y ello conlleva algunas desventajas. Pensar en el trabajo sin parar acarrea un desgaste en las relaciones personales. Csikszentmihaly afirma que la mayor parte de los genios no logran entablar relaciones sociales durante su juventud, principalmente dada su curiosidad por disciplinas que resultan extrañas para sus semejantes. El resto de adolescentes mantienen una actitud gregaria y no suelen estar dispuestos a dedicar tiempo a perfeccionar sus talentos.
Algunas veces, la dedicación que requiere ser un genio puede entenderse como una patología. Estos sacrificios continuados pueden convertirse en obsesión: los creadores excepcionales no tienen por qué ser felices. Sólo debemos parar a ver la austeridad con que vivieron Sigmund Freud, T.S. Eliot o Mohandas Gandhi, así como la terrible soledad autoimpuesta que marcó la vida de Albert Einstein. Gran parte de los genios desarrollan rasgos neuróticos: su dedicación les tornó egoístas y maniáticos.

5. Trabajan por pasión, no por dinero

Los auténticos genios viven con amor su trabajo, y rara vez se entregan a éste por dinero o recompensa alguna, sino por pasión y vocación. “Los creadores que han perfeccionado su obra por el placer de la actividad en sí más que por las recompensas extrínsecas han engendrado un arte que ha sido enjuiciado socialmente como privilegiado”, afirma el escritor Dan Pink en su libro La sorprendente verdad sobre qué nos motiva (Planeta, 2000). “Asimismo, son aquellos a los que motivaba en menor medida las recompensas extrínsecas los que, finalmente, las recibían”.

¿Cómo puedo saber si me mienten por WhatsApp?

 

Mentimos entre 10 y 200 veces a día

Parece ser que mentimos más de lo que creíamos, y no hace falta ser un mentiroso compulsivo para hacerlo. Según Pamela Meyer, autora de Liespotting: Proven Techniques to Detect Deception las personas solemos mentir entre 10 y 200 veces al día, debido a que solo decimos partes de la verdad que se consideran socialmente aceptables o frases que la gente quiere escuchar. Robert Feldman, profesor de Psicología de la Universidad de Massachusetts, explica en su libro The liar in your life, que mentimos entre dos y tres veces en una primera conversación de 10 minutos con un nuevo conocido. ¿La causa? Las mentiras son un mecanismo automático de defensa que se activa cuando alguien siente su autoestima amenazada.

¿Cómo saber si nos mienten por Whatsapp?

En el artículo ‘el Efecto Pinocho‘ nos hacíamos eco de la termografía, una técnica que detecta la temperatura corporal, y que puede ser útil para revelar que estamos mintiendo. Podríamos pensar que antes se pilla a un mentiroso que a un cojo, pero según investigadores de la Universidad Brigham Young en Estados Unidos, los seres humanos somos muy malos detectores de mentiras. En una interacción cara a cara, solo nos damos cuenta de que otro nos están engañando entre un 54% y un 56% de las ocasiones (y eso que podemos observar los mensajes no verbales, el tono de su voz, el movimiento de las manos, los gestos o la mirada de la persona con la que estamos conversando). Aunque al hablar por Whatsapp las posibilidades de pillar a un mentiroso decrecen, el mismo estudio afirma que es posible reconocer a un mentiroso por varios indicadores: el mentiroso por Whatsapp tarda más en responder, edita más mientras escribe (borrando y reescribiendo) y sus mensajes son más cortos de lo habitual.


Experimento: ¿cómo detectar cuando nos mienten por WhatsApp?

El experimento consistía en que los participantes, estudiantes universitarios, no solo debían responder rápidamente a decenas de preguntas aleatorias que les realizaba su ordenador; sino que además tenían que mentir en, al menos, la mitad de las respuestas que se presentaban. “Las conversaciones digitales son un terreno que fomenta el engaño porque las personas pueden disimular y hacer que sus mensajes parezcan creíbles”, explica Tom Meservy, profesor de Sistemas de la Información y autor del estudio recogido por la revista ACM Transactions on Management Information Systems. Además, Meservi comenta: “se comprobó que se tarda un 10% más de tiempo en escribir respuestas cuando son falsas, ya que éstas son editadas muchas más veces y, casi siempre, son más breves de lo habitual”.

El rostro del líder: los jefes comparten ciertos rasgos faciales


Existen muchas críticas a los sistemas basados en un líder y jerarquías rígidas. El principio de Peter, por ejemplo, se basa en la idea de que los empleados ascienden hasta llegar a su punto de máxima incompetencia. De ahí que en muchas organizaciones sea evidente que los cargos más importantes están ocupados por gente que no sabe muy bien lo que hace, es decir, por líderes que han llevado sus capacidades a un límite no asumible. Sin embargo, lo que todos esperamos de una organización con gente que manda y gente que sigue órdenes, es que los primeros, independientemente de su nivel de competencia relativa, al menos hayan llegado a su posición por méritos propios.
¿Hasta qué punto se está haciendo bien el trabajo de selección de personal en este sentido? Pues, según una investigación en psicología, parece que las empresas y organizaciones jerarquizadas son un coladero de oportunistas involuntarios. Gente que, sin saberlo, se beneficia con el hecho de tener ciertos rasgos faciales.

Líderes que lo son por la cara

El estudio, que se publicó en la revista The Leadreship Quarterly, muestra que una serie de personas escogidas al azar es capaz de saber a qué se dedican los líderes sólo fijándose fotografías en blanco y negro de sus caras. Esto significaría que las personas que aparecen en las imágenes podrían haber llegado a sus cargos de responsabilidad, en parte, gracias a cierta predisposición inconsciente a elegir líderes con determinados rasgos faciales.
Estos investigadores concluyen que las personas encargadas de seleccionar a los perfiles de alta responsabilidad podrían estar fiándose de criterios tan irracionales como la evaluación de la cara a la hora de seleccionar una candidatura. Pero no sólo eso: cada puesto requiere un tipo de liderazgo especial, y también los rasgos faciales elegidos en los líderes varía según el puesto al que optan.

Adivinación

Los investigadores se han basado en una serie de experimentos para llegar a esta conclusión. Lo primero que hicieron es constatar que hay estudios en los que se relaciona apariencia facial y las probabilidades de alcanzar posiciones de liderazgo. Sin embargo, ellos se centraron en los sesgos que presumiblemente existen a la hora de asignar puestos de liderazgo concretos a personas sólo mediante la evaluación de sus caras.
Para ello, seleccionaron 614 personas voluntarias residentes en Gran Bretaña y se les mostró de manera individual una serie de fotografías en blanco y negro en las que se mostraba la cara de ciertos líderes estadounidenses, no conocidos al otro lado del Atlántico. Este grupo de líderes estaba compuesta por CEOs de grandes compañías, generales de la armada, gobernadores elegidos entre 1996 y 2006 y entrenadores deportivos. A cada participante se le nombraba una categoría (por ejemplo, “generales de la armada”), y a partir de ese momento este debía decir cuál de las dos caras que se le mostraban correspondía a ese tipo de líder. Luego, cada uno de ellos expresaba su grado de seguridad en sus capacidades “adivinatorias” puntuándose en una escala del 0 al 100.
Lo cierto es que, a pesar de tender hacia el pesimismo a la hora de evaluar su grado de certeza en las decisiones, los voluntarios se mostraron inusitadamente hábiles a la hora de relacionar a los líderes con su profesión real. El único tipo de líder que se les resistió fue el de los políticos, ya que en estos casos no acertaron más de lo esperable por el azar (es decir, un 50% de las veces).

Liderazgo, rasgos y estereotipos

En un segundo experimento conducido por el mismo equipo de investigadores, 929 participantes británicos evaluaron 80 de las caras de los altos cargos en 15 aspectos diferentes: extraversión, masculinidad, carisma, etc. Esta vez, sin embargo, los voluntarios no sabían que estaban viendo caras de líderes. No se les proporcionó ninguna información adicional sobre las personas que aparecían en las fotografías.
Como resultado de este ejercicio, los investigadores comprobaron que ciertos líderes tendían a puntuar alto en algunas dimensiones que están relacionadas con estereotipos propios de su área profesional. Por ejemplo, las caras de los militares puntuaban alto en masculinidad y bajo en calidez, mientras que los CEOs puntuaban alto en “nivel de competencia”. Cabe recordar que estas puntuaciones las daban personas que no tenían ni idea de a quién estaban evaluando.

El problema

Esta línea de investigación es una muestra más de que muchas organizaciones no están siendo tan racionales como cabría esperar a la hora de seleccionar a sus líderes, personas con una alta responsabilidad en el éxito colectivo de la empresa. Importantes seleccionadores de personal podrían estar dejándose llevar por apreciaciones subjetivas sobre cómo debe ser la apariencia de los altos cargos, siguiendo a rajatabla los cánones que dicta el estereotipo.
Desde luego, evaluar la cara de alguien puede ser más fácil que medir aspectos tan abstractos como la capacidad de liderazgo, las habilidades sociales o las habilidades de negociación; entre otras cosas, porque juzgar a alguien por su estética es un proceso automático. Sin embargo, no deja de ser cierto que organizaciones basadas en la complejidad del trabajo en equipo merecen también una selección de personal igualmente compleja y racional.
Los Recursos Humanos vuelven a estar en el punto de mira (o, al menos, los norteamericanos).

Los 10 beneficios del Coaching (claves para tu desarrollo personal)

 

Descubriendo los beneficios del Coaching

El Coaching aporta muchos beneficios. Si en otro artículo hablábamos sobre los tipos de coach que existen y sus distintas funciones, hoy ahondamos en qué puede aportarnos a nuestras vidas la presencia de un profesional del coaching.
Para algunos es solamente una moda pasajera, pero los que lo han probado coinciden en que es un proceso beneficioso para su bienestar. Junto al coach, una persona puede trabajar cualquier aspecto de su vida personal, deportiva o laboral. En los últimos años han surgido diferentes tipos de coaching, algunos tan llamativos como el Coach Fitness o el Coaching Nutricional.
Sea cual sea el tipo de coaching, esta práctica está íntimamente relacionada con el cambio: analiza el estado presente para fijar los objetivos y crear un plan de acción que permita lograr las metas de manera específica, medible, alcanzable, relevante y en un tiempo determinado (objetivos SMART).

¿Has puesto ya un coach en tu vida?

La figura del coach acompaña al coachee (la persona “entrenada”) durante todo el proceso y lo guía para sacar todo su potencial. Para conseguir esto es necesario crear una relación de confianza y compromiso entre los actores que participan en este proceso. Si el coaching es eficaz, va a ser positivo para el coachee tanto a nivel personal como laboral.
Para saber cuáles son las ventajas de este proceso, a continuación os presentamos una lista con los muchos beneficios del coaching.

1. Ayuda a definir los objetivos

Como ya hemos comentado, el coaching ayuda a definir los objetivos de manera realista. Uno de los beneficios del coaching es, básicamente, que ayuda a establecer prioridades y a definir la manera de alcanzar las metas.

2. Más creatividad

El entorno del coachee durante el proceso del coaching favorece el aprendizaje. Además, el coach fomenta el descubrimiento de alternativas nuevas por parte del coachee, le ayuda a conectar con el lado emocional y permite desbloquear la mente para generar nuevas ideas que le lleven al cambio. La creatividad implica cambio también pues transforma una realidad en otra.

3. Mayor flexibilidad y adaptabilidad al cambio

El coaching es transformador, y su esencia está empapada del espíritu de cambio. Uno de los beneficios del coaching es que hace responsable al coachee de su propio destino y le permite adaptarse mejor al entorno.

4. Mejora de las relaciones

El coaching se aplica para mejorar los resultados que una persona obtiene en la relación con su pareja, con su familia, con su jefe, con sus subordinados, con la gestión de conflictos, con la negociación, etcétera. Además, otro de los beneficios del coaching es que mejora las habilidades comunicativas e interpersonales. En otras palabras, ayuda a conectar con otras personas.

5. Empoderamiento

Uno de los beneficios del coaching es que le ayuda a liderar con la propia propia vida del coachee, es decir, a empoderarse. Gracias al proceso de coaching, el coachee aprende a decidir por sí solo y a asumir sus propias responsabilidades.

6. Reduce el estrés y ayuda a gestionar el tiempo

El coaching ayuda al coachee a organizarse y a seleccionar objetivos alcanzables. La mala planificación genera un estrés innecesario que resulta perjudicial para el que lo padece. Una buena estrategia, la motivación necesaria, la responsabilidad, el esfuerzo y la disciplina permiten lograr los objetivos marcados de manera ecológica.

7. Es motivador

El coaching ayuda a descubrir las verdaderas motivaciones de la persona, lo que le gusta hacer. De manera sistemática el coachee alcanza a entender las verdaderas prioridades en su vida. No hay nada más motivante que luchar por lo que uno realmente quiere.

8. Trabaja el bienestar

El camino del desarrollo personal no es ni más ni menos que el camino hacia el bienestar, hacia el lugar en el que uno quiere estar. Para conseguirlo, no obstante, hay un único camino: hacer aquello que da sentido a la vida de cada uno.
Pese a que la reflexión hacia el desarrollo personal podría parecer fácil a simple vista, son muchas personas que acuden a profesionales del coaching para poder desbloquearse. El coach ayuda a conectar con los deseos y emociones, y aunque la reflexión podría parecer un acto intelectual, es un acto emocional: el desapego juega un papel determinante a la hora de crecer como individuos. Uno de los beneficios del coaching es, sin duda, el cambio en busca del bienestar.

9. Ayuda a llegar más lejos

El coaching permite cambiar las creencias limitantes por creencias potenciadoras. Si los límites los pone la mente, eso quiere decir que la propia mente también ayuda a llegar más lejos, a superar barreras.

10. Autoconocimiento

Para poder marcar objetivos coherentes con las prioridades de cada uno, el coach provoca que el coachee reflexione y se conozca a sí mismo. Se trata de tocar sus emociones íntimas, su propia esencia. Conocerse a uno mismo es el primer paso para el cambio, es decir, para el propio crecimiento personal.

Los principios de la PNL: Introducción y objetivos

 

Los principios de la PNL: Introducción y objetivos

La Programación Neurolingüística es una serie de estrategias que se centran en identificar y usar modelos de pensamiento que influyen sobre el comportamiento de una persona como una manera de mejorar la calidad y resolver problemas. Los objetivos de la PNL son, entre otros, corregir las representaciones cognitivas, haciéndolas más útiles, y proporcionar una serie de estrategias y habilidades eficaces para la mejor adaptación de aquellas situaciones que surgen en el día a día.
Es importante mencionar que esta práctica no se basa en ninguna teoría, sino que es una recopilación de estudios, investigaciones y técnicas. Por tanto, es necesario comprobar cómo funciona, mediante sus pilares fundamentales, es decir, los principios de la PNL.

Los 10 principios de la PNL, explicados

Tras exponer los objetivos de la Programación Neurolonguistica, a continuación os presentamos los 10 principios de la PNL:

1. El mapa interior es único

Uno de los principios de la PNL hace referencia a la orientación que las personas tienen en el mundo que les rodea. La manera de orientarse que tiene la persona tiene que ver con su mapa interior. En las etapas tempranas de la vida el mapa interior es simple. Sin embargo, a medida que crecemos el mapa se hace más complejo y se van abriendo nuevos caminos. Cuanto más completo sea el mapa, más alternativas de éxito tendrá la persona. El mapa del mundo es individual, se construye a través de nuestras propias experiencias por lo que cada persona tiene su mapa y no hay dos mapas iguales.

2. El mejor mapa es el que ofrece más de un camino

Como se ha comentado en el punto anterior, el mapa más completo también es más exacto y ofrecerá más oportunidades de llegar a un objetivo o resolver el problema. Esto tiene que ver con la flexiblidad y la posibilidad de reaccionar de diversas maneras ante un suceso vital. El mapa no es el territorio que representa, pero si es correcto tendrá una estructura semejante al territorio y será más útil.

3. Cada comportamiento tiene una intención positiva

Este puede ser uno de los principios de la PNL más discutidos. Este punto hace referencia a que cada persona y cada comportamiento tiene de forma intrínseca una intención positiva. Puede ser, por ejemplo, que alguien dude que un fumador tiene un intención positiva fumar. Pero según este principio, el fumador podría fumar para relajarse o para ser aceptado socialmente. La PNL intenta redirigir esa intención positiva hacia un patrón de conducta más adaptativo y adecuado para la persona.

4. La estructura de la experiencia

Este principio muestra como cada experiencia está compuesta de una estructura determinada. Cada pensamiento, sentimiento, recuerdo o experiencia está formado por una serie de elementos. Esto quiere decir, que si cada experiencia tiene una estructura, gracias a un cambio en su composición se puede cambiar su efecto.

5. Todos los problemas tienen solución

Este principio se refiere a que todos los problemas tienen solución. Pese a que puede parecer utópico, ya que, en ocasiones, no se pueden llevar a cabo determinadas soluciones. En otros momentos, habrá problemas que no tengan una solución clara. Esto tiene que ver con el mapa que posee la persona, ya que cuantos menos caminos o alternativas posea, menos soluciones podrá dar a la situación concreta. Además, la interpretación del problema tiene que ver con el contenido del mapa. Un mapa más rico y que ofrece más recursos, percibirá ciertas situaciones como menos problemáticas.

6. Todo el mundo posee la fuerza que necesita

Este es uno de los principios de la PNL que tiene que ver con el desarrollo personal de la persona, ya que se refiere a que cada persona posee la fuerza necesaria para conseguir lo que se proponga. El problema surge cuando la autoconfianza se ve afectada por las creencias limitantes de la persona.

7. El cuerpo y la mente forman parte del mismo sistema

Este principio se refiere a que el ser humano es cuerpo y mente. En otras palabras, cada sentimiento y cada emoción afectan al cuerpo. Esto también se cumple a la inversa. Por ejemplo, una enfermedad que afecte al cuerpo va a tener repercusiones a nivel psicológico. Por tanto, para la PNL, los cambios de pensamiento que modifican los problemas corporales son importantes.

8. El significado de la comunicación depende del resultado 

Es necesario establecer pautas de comunicación claras, que no den lugar a malos entendidos, ni opción a interpretaciones personales sesgadas por parte del receptor del mensaje.

9. No existen los fracasos sino las oportunidades

Cuando una persona está continuamente en movimiento tiene diferentes caminos para alcanzar la meta. Los fracasos deben ser vistos como oportunidades, es decir, como medidas que permiten superarse y avanzar en la dirección deseada.

10. Si algo no funciona hay que intentar otra cosa

En ocasiones, las personas insisten en hacer algo que no funciona, además no cambian la manera de actuar. En este punto tiene sentido la famosa frase “no esperes resultados diferentes si haces siempre lo mismo”. La PNL puede ayudar a reconocer y modificar esos comportamientos que no son eficaces y que hacen tropezar, una y otra vez, con la misma piedra.

¿Qué estudiar? Consejos para decidir carrera universitaria (o no)


Si estás leyendo esto, es muy posible que ahora mismo te encuentres en esa etapa de la vida en la que debes decidir por primera vez a qué campo de actividad dedicarás tus esfuerzos durante los próximos años y te estás preguntando qué estudiar.
Algunas personas tienen claro qué van a hacer al abandonar la educación secundaria, pero es muy frecuente que la incertidumbre acerca del futuro a corto plazo paralice a algunos alumnos y haga que su toma de decisiones se complique. Si este es tu caso y te gustaría una ayuda para decidir qué estudiar durante los próximos años, esta mini-guía es para ti.

1. Considera la posibilidad de no ir a la universidad

En serio. Antes de empezar una carrera universitaria, asegúrate que no has tomado esa decisión por simple inercia. Que mucha gente empiece un curso universitario no es motivo para hacerlo tú también. Considera primero cómo sería dedicar tu tiempo y esfuerzo a otras cosas, y si esas posibilidades te convencen más, estarás un paso más cerca de dedicarte a lo que te gusta.
Ten en cuenta también que estudiar no implica necesariamente ir a la universidad: hay otras muchas modalidades de aprendizaje y tipos de centro en los que podrás formarte dedicándote específicamente a lo que te gusta (y seguramente con un trato personalizado que no hallarás en demasiados campus universitarios).

2. ¿Ciencias o humanidades?

La pregunta “¿qué estudiar?” puede simplificarse creando dos posibles respuestas: ciencias o humanidades. Puede que resulte una categorización poco precisa, pero lo cierto es que hay grandes diferencias en el tipo de contenidos que se dan en las carreras de ciencias y de letras.
Desde el punto de la sociología, los estudiantes de ciencias y de letras son diferentes y tienen expectativas diferenciadas acerca de lo que quieren aprender. La ciencia se fudamenta en el planteamiento de preguntas precisas que pueden ser respondidas con concreción, mientras que en las humanidades el poder de concreción se pierde en favor de una capacidad para plantearse las categorías utilizadas en la investigación.

3. ¿Cuál es tu manera de pensar?

Los estudiantes de ciencias y de humanidades también se diferencian neuroanatómicamente, tal y como vimos en otro artículo.
Los estudiantes de ciencias podrían tender a mantenerse más distanciados de aquello que estudian, mientras que los de humanidades lograrían una conexión emocional de más calado. A la hora de tomar la decisión sobre qué estudiar podrías examinar tus expectativas en este sentido: ¿tiendes a implicarte emocionalmente con el objeto de estudio? Aunque debes ser cauto: esta investigación habla sobre tendencias generales, no sobre casos particulares.

4. Qué estudiar no significa cómo estudiar

Hay muchos acercamientos posibles a un mismo tema. Si te interesa el arte, por ejemplo, ten en cuenta que en cada universidad y escuela la materia que te darán puede ser desde ligeramente distinta a completamente diferente. Investiga acerca de tus posibilidades de ingreso al centro específico que te atrae más y decide teniendo en cuenta eso.

5. Qué estudiar significa, en parte, en qué trabajar

Cuando hablamos sobre estudiar una carrera, no hablamos simplemente de obtener información sobre una disciplina determinada. Hablamos también, en la mayoría de los casos, sobre pagar las clases (un saludo a nuestros lectores de Argentina), dedicar tiempo y esfuerzo a estudiar algunas asignaturas que no nos interesan, hacer prácticas obligadas y obtener un título con validez curricular.
Hoy en día la universidad está enfocada hacia la consecución de un trabajo y, por mucho que este hecho sea discutible, aprovechar al 100% la universidad implica usar esa experiencia para buscar trabajo.

6. Asegúrate de que puedes dedicarle a los estudios el esfuerzo que merecen

A la hora plantearte qué estudiar, piensa también en tu nivel de conocimientos actual y en tu capacidad para aprender rápidamente durante las primeras semanas de carrera, que es cuando puedes notar que necesitas clases de refuerzo para seguir el ritmo de las clases. Si crees que una carrera te va a exigir demasiado, vale la pena pensar en otras.
No te confíes viendo que la nota de acceso de algunas de las carreras más complicadas no es tan alta como cabría esperar: eso sólo indica que hay menos gente interesada en esos estudios, no que la carrera en sí resulte sencilla.

7. ¿Te apetece estudiar la carrera de Psicología?

Psicología y Mente es una web dedicada a profundizar sobre la Psicología y las Neurociencias, así que nos vas a permitir que barramos para casa y asumamos que puedes estar interesado en este campo del conocimiento. Un artículo que puede ser muy útil para ti:
Y si ya has empezado a estudiar Psicología, no te pierdas nuestra mini-guía del estudiante:
La carrera de Psicología es muy variada y tiene mucho que ofrecerte. Si crees que tu sitio está entre libros sobre la conducta humana y te interesa conocer por qué cada persona es diferente a las demás, no lo dudes y considera Psicología como una disciplina que disfrutarás desde el primer día.

Resumiendo

Acabes decantándote por una carrera u otra, o bien por seguir tu formación por otro lado, ten en cuenta que la vida da muchas vueltas y por eso es importante que te sientas a gusto con lo que hagas. Piensa que dedicarás muchas horas a ello, así que escoge qué estudiar no tanto por que creas que puede tener buenas salidas profesionales sino por lo motivado que te sientas por cada disciplina.

viernes, 29 de mayo de 2015

Tipos de autoestima: relación con el bienestar

 

Tipos de autoestima: relación con el bienestar

Existen diferentes tipos de autoestima según si es alta o baja y estable o inestable. La autoestima es uno de los factores más relevantes para el bienestar personal y una clave para relacionarnos con el entorno que nos rodea de una manera positiva. Ya que los diferentes tipos de autoestima tienen sus peculiaridades, en el artículo de hoy vamos a repasar sus características.
Pese a que el concepto de autoestima ha sido uno de los más confusos, cuestionados y analizados a lo largo de la historia de la psicología, la mayoría de expertos indican que se trata de un elemento que se halla de manera innata en cada individuo y que está expuesta a múltiples modificaciones a lo largo de nuestra vida.
La autoestima evoluciona y se desarrolla debido a la relación con el mundo, y cambia constantemente ya que está ligada al cambio de la sociedad.

Los 4 Tipos de autoestima

Como hemos comentado, la autoestima necesita ser alimentada, en grados diversos, desde el exterior. Aunque las bases se construyen durante la infancia, la autoestima no es inalterable en otras etapas de la vida.
Es importante destacar que no es lo mismo autoestima que la autoconfianza. La autoconfianza (autoeficacia) está relacionada con los objetivos y metas específicas que nos proponemos, mientras que la autoestima se refiere a la valoración global que hacemos de nosotros mismos.
Ya que la autoeficacia se refiere a la confianza en la capacidad de uno mismo por una meta tarea específica, alguien puede pensar que es muy bueno practicando el tenis, sin embargo puede tener una autoestima baja: igual le gustaría ser más alto o tener mejor físico, por el contrario, confía en su habilidad para batir a sus rivales en un campo de tenis. La autoeficacia podría afectar de manera positiva a la autoestima del individuo si considera que es una prioridad en su vida.
Parece ser que existen 4 factores relevantes que afectan a la autoestima, son los siguientes:
  1. La historia de triunfos y la posición alcanzada a través del reconocimiento que los triunfos brindan
  2. Las áreas asociadas a los distintos triunfos, siempre y cuando sean significativos para la persona.
  3. El respeto, aceptación e interés que el individuo recibe de las personas que considera importantes en su vida.
  4. El control y la defensa de consecuencias e implicaciones negativas. Es decir, la atribución interna o externa que hace la persona de los eventos negativos.
En su libro “Autoestima e identidad. Narcisismo y Valores sociales”, Luis Hornstein propone 4 tipos de autoestima. Según el autor, los tipos de autoestima varían debido a que la valoración de uno mismo puede ser más o menos alta y más o menos estable.
A continuación se presentan los 4 tipos de autoestima:

1. Autoestima alta y estable

Las circunstancias externas y los acontecimientos de vida tienen poca influencia sobre la autoestima. Las personas con este tipo de autoestima se desenvuelven de manera abierta ya que no necesitan defender su imagen, se defiende sola. Además, la persona es capaz de defender su punto de vista sin desestabilizarse.

2. Autoestima alta e inestable

Las personas con este tipo de autoestima, tienen una elevada autestima pero son incapaces de mantenerla constante. Los contextos competitivos pueden tener un efecto desestabilizador. Responden con actitud crítica ante el fracaso, ya que estos son percibidos como amenazas. El individuo mostrará convicción al defender su punto de vista, pero no aceptará otros puntos de vista y tenderá a monopolizar la palabra en una discusión. La inestabilidad de la autoestima conduce a situar la autoestima como preocupación central y exige preservarla a cualquier precio y apelar a una actitud agresiva (para promoverla) o bien pasiva (para protegerla).

3. Autoestima baja y estable

Los eventos externos (sean favorables o no) no alteran la autoestima del sujeto, que no se esfuerza por promover su imagen personal y se infravalora. Los individuos con este tipo de autoestima son indecisos y tienen un gran temor a equivocarse. Estas personas no defienden sus puntos de vista ya que la valoración de sí mismos es siempre negativa, creen que no están a la altura.

4. Autoestima baja e inestable

Las personas con este tipo de autoestima suelen ser sensibles e influenciables por eventos externos. En cuanto se enfrentan a un evento exitoso, su autoestima sube, pero en cuanto termina la euforia del momento, su nivel de autoestima vuelve a bajar. Puede mostrar su opinión, pero no la defiende.

Bonus: Autoestima inflada

Otros autores también hablan de un tipo de autoestima perjudicial para el bienestar, la autoestima inflada. Pero, ¿qué es la autoestima inflada?
La persona con la autoestima inflada es incapaz de escuchar a los demás, mucho menos de aceptar o reconocer un error. La percepción de sí mismos está tan inflada que se creen mejor que el resto. Cuando las cosas se complican, no reconocer los errores y enseguida culpan a los demás. Este tipo de actitud genera conductas negativas ya que no son capaces de hacer autocrítica y corregir los errores. En general, estos individuos menosprecian a los demás y adoptan un comportamiento hostil hacia ellos.